Audi celebra un hito importante: los 40 años de su división Audi Sport. Y lo hace de una manera verdaderamente exclusiva con el lanzamiento del Audi RS e-tron GT Ice Race Edition, una edición limitada que consta de tan solo 99 unidades para el mercado europeo.
El Audi RS e-tron GT Ice Race Edition se destaca de inmediato por su diseño exterior único. La carrocería de este vehículo presume un color Florett plateado, que se combina magistralmente con detalles en aluminio a la vista.
Audi ha buscado crear una estética que evoca la imagen de cristales de hielo, lo que añade una sensación de frescura y elegancia al conjunto. Además, los tonos blancos y morados se incorporan a la paleta de colores, y las llantas de 21 pulgadas en negro completan la imagen, brindando un equilibrio perfecto entre deportividad y sofisticación.
ELEGANCIA EN EL INTERIOR
El lujo y la exclusividad continúan en el interior del Audi RS e-tron GT Ice Race Edition. Los asientos revestidos en cuero plateado se combinan con detalles en negro y costuras en tono violeta, creando un ambiente que refleja la calidad artesanal de Audi.
El volante fusiona cuero y Alcántara, brindando una sensación táctil excepcional para el conductor. Incluso las alfombrillas están personalizadas con el distintivo logotipo RS, enfatizando la atención al detalle en cada rincón de este vehículo.
Como si la belleza y la exclusividad no fueran suficientes, una placa identificativa colocada en el salpicadero sirve como recordatorio de la exclusividad de este vehículo. Cada propietario de un Audi RS e-tron GT Ice Race Edition tendrá el orgullo de saber que es uno de los afortunados dueños de una de las 99 unidades producidas.
PURA POTENCIA GRACIAS A SUS DOS MOTORES ELÉCTRICOS
Este vehículo no solo impresiona con su diseño y lujo, sino que también ofrece un rendimiento impresionante. Equipado con dos motores eléctricos, este vehículo genera una potencia total de 598 caballos de fuerza, una cifra que puede aumentar a 646 caballos durante breves momentos gracias al modo Boost activado.
Una batería de 85 kilovatios hora útiles proporciona una autonomía de 472 kilómetros, lo que demuestra que la potencia eléctrica no sacrifica la practicidad ni la autonomía.
