Mientras que algunas de las nuevas marcas que han llegado a la industria automotriz en el último lustro se dedican a concebir súper deportivos eléctricos para disfrutar en largas distancias, otras optan por concentrarse en la movilidad urbana. Dentro de este último grupo está la startup italiana XEV, que presentó la versión de producción del pequeño Yoyo.

El XEV Yoyo es un biplaza de 2.530 mm de largo, 1.500 mm de ancho, 1.560 mm de alto y una distancia entre ejes de 1.680 mm. Está construido a partir de un chasis de acero y su interior se destaca porque muchas de sus piezas fueron impresas en 3D.

El habitáculo está reforzado contra impactos laterales, frontales y vuelcos con barras de protección acero HSS. Cuenta con un mini maletero que tiene una capacidad de 160 litros. Utiliza llantas de 14 o 15 pulgadas, según versión.

El equipamiento base incluye velocímetro digital y una pantalla táctil de infoentretenimiento de 7 pulgadas en la cabina. También tiene aire acondicionado, arranque sin llaves, Bluetooth, tres USB para carga de dispositivos, levantavidrios eléctricos y ABS.

Está impulsado por un motor síncrono de imanes permanentes situado en el eje trasero, que ofrece una potencia máxima de 7,5 kW nominales y 15 kW punta. De esta manera, tiene una velocidad máxima de 80 km/h

Se alimenta de una batería LFP (litio ferro-fosfato) de 10,3 kWh que funciona a 77 voltios y que puede ser intercambiada. La autonomía es de unos 150 kilómetros.

El diminuto vehículo está pensado para “todos los mercados europeos importantes”, aunque originalmente iba a ser desarrollado para China. Tiene un precio competitivo para este creciente segmento: 9.900 euros.

 

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