“El todoterreno diseñado para las aventuras más extremas”. Así define la marca británica Fering Technologies a su singular 4×4 bautizado como Fering Pioneer. El vehículo es responsabilidad del ingeniero Ben Scott-Geddes, experto en materiales compuestos que trabajó para Ferrari y McLaren.
La idea de Fering fue concebir un todoterreno tan liviano como fuese posible y lo consiguió gracias a un chasis de aluminio recubierto con una tela de alta resistencia que no se abolla, es fácil de reparar y es mejor aislante que el metal. A partir de este concepto se consiguió un peso de 1.500 kilos, menos que un Ford Mondeo.
El Fering Pioneer, además, cuenta con tres motores. Uno es de combustión y funciona con biodisel y los otros dos son eléctricos y están ubicados en cada eje. El impulsor térmico es de 800cc y eroga 95 CV y se encarga de generar la energía para los impulsores eléctricos.
El paquete incluye una batería de óxido de titanato de litio que, según el fabricante, ha sido diseñada para soportar condiciones climáticas extremas que acabarían con una batería de iones de litio convencional.
Con este tren motriz, que de forma combinada es capaz de generar 600 Nm de torque, el 4×4 consigue una autonomía de 7.000 kilómetros, casi el doble de lo que se habían propuesto en Fering.
Como parte del proyecto, la marca inglesa puede adaptar la unidad de potencia al combustible más popular de cualquier región y para demostrarlo ya trabaja en un motor de etanol para Brasil y en una versión de pila de combustible de hidrógeno para Asia.
El Fering Pioneer, que mide 4,80 metros de largo, 2,01 metro de ancho y 1,96 metro de alto, utiliza llantas de camión que pueden ser equipados con cualquier tipo de neumático.
La producción en serie estará limitada, en una primera etapa, a unas 200 unidades y el precio de cada una rondaría los 200.000 dólares. Las entregas comenzarían a mediados del 2022.
